Cuando éramos estudiantes, muchos de nosotros participamos en algún tipo de enseñanza de lenguas extranjeras en la escuela y, dependiendo de la edad y el país, esto podría haber ido desde conferencias incomprensibles del profesor hasta canciones cantadas, pasando por un intenso entrenamiento gramatical. En el mundo de la educación, las filosofías y prácticas de adquisición de segundas lenguas cambian a un ritmo vertiginoso, y el nuevo avance metodológico que se pregona hoy puede ser ridiculizado y descartado mañana. A continuación se exponen 12 de los métodos de enseñanza de idiomas más destacados, concretamente en el ámbito de la enseñanza del inglés como lengua extranjera. Se presentan aquí en orden aproximado de aparición en los principales planes de estudio de lenguas extranjeras.
Gramática-Traducción
Este método ha existido desde los tiempos de la Antigua Grecia y Roma, y se centra en el estudio de las reglas gramaticales de un idioma y la traducción de palabras del vocabulario. Este estilo suele implicar la memorización de conjugaciones verbales y la traducción directa de palabras y frases de un idioma a otro. Ha caído en gran medida en desuso, aunque todavía se emplean partes de él en escuelas más tradicionales.
Método directo
Este enfoque rompió con los métodos tradicionales, ya que se centra en gran medida en hablar y escuchar, no utiliza las lenguas maternas de los alumnos y pretende proporcionar una experiencia totalmente inmersiva. Ha demostrado ser muy eficaz para ayudar a los alumnos a aprender a conversar y comunicarse, aunque este marco puede suponer un reto para los alumnos más jóvenes y principiantes, ya que pueden sentirse perdidos y abrumados al principio.
Método audiolingüe
Este método consiste en escuchar y repetir, y puede sonar familiar a los alumnos más mayores: «Bien, clase. Repitan después de mí…». El objetivo es desarrollar las destrezas orales y auditivas mediante la repetición y la atención a las distinciones audiolingües. Se hace mucho hincapié en obtener un «acento de hablante nativo». Un exceso de confianza en este sistema puede producir estudiantes que pueden hablar muy bien, pero no tienen ni idea de lo que están diciendo.
Respuesta Física Total (RFT)
Este estilo implica el aprendizaje a través del movimiento físico y la actividad. Por ejemplo, el profesor puede decir: «Tócate la nariz», y todos los alumnos se tocan la nariz, o el profesor puede dirigir un juego de Simon Dice o hacer que los alumnos representen varios escenarios. La música y el baile son habituales en este estilo, y aunque los alumnos mayores pueden ser más reacios a saltar por el aula, a los más pequeños les suelen encantar las actividades lúdicas y entretenidas.
Aprendizaje comunitario de idiomas (CLL)
El aprendizaje comunitario de idiomas se centra en el establecimiento de relaciones entre profesores y alumnos. La enseñanza/aprendizaje se considera más un esfuerzo de colaboración entre el profesor y los alumnos, y aunque el profesor pretende modelar las destrezas lingüísticas adecuadas, la comunidad del aula y los compañeros de clase también contribuyen en gran medida al aprendizaje.
Sugerencias
El entorno de aprendizaje desempeña aquí un papel fundamental, y se anima a los alumnos a disfrutar del nuevo idioma a través de la música, la actuación y la libre expresión. Durante la clase suele sonar música de fondo, y los alumnos pueden relajarse en sillones o tumbarse en el suelo. El profesor también puede dirigir actividades de respiración e incluso de meditación al principio de la clase. La atención se centra menos en las reglas gramaticales y más en una experiencia de aprendizaje cómoda.
El método natural
Se trata de un método muy popular desde los años 80 y su objetivo es que los alumnos adquieran el nuevo idioma de forma natural, como lo hacían en su lengua materna. Los alumnos adquieren vocabulario y conocimientos gramaticales de la misma forma que lo hacían de pequeños: contando historias, escuchando y explorando. Este método cuenta con destacados partidarios, como Stephen Krashen, que creen que el enfoque intencionadamente limitado en la gramática y la escritura es un aspecto positivo para el aprendizaje en general.
Enseñanza de idiomas basada en tareas (TBLT)
Se trata de un sistema en el que a los estudiantes de nivel intermedio y/o superior se les asignan tareas específicas que deben completar, como escribir una carta, participar en una entrevista o pedir comida en un restaurante. Este método es popular para estudiantes de inglés de negocios que tienen situaciones y contextos específicos que necesitan dominar.
Enseñanza de idiomas basada en el contenido (CBLT)
Este sistema se centra en la enseñanza de contenidos específicos, como temas de Historia o Ciencias, en la segunda lengua. Como las destrezas lingüísticas se refuerzan de forma más indirecta, este método es más adecuado para alumnos avanzados.
El método silencioso
En este método, es el profesor el que permanece «en silencio», y los alumnos trabajan para resolver problemas o enigmas, ya sea de forma independiente o colaborando entre ellos. El profesor es más bien un guía que plantea diversos retos, y la atención se centra en la autonomía y el estudio independiente. Los críticos afirman que puede carecer de estructura o ser demasiado abstracta para lograr un aprendizaje duradero.
Enseñanza comunicativa de idiomas (CLT)
Como su nombre indica, este método hace mucho hincapié en las destrezas comunicativas, y las destrezas orales y auditivas se desarrollan ampliamente mediante actividades orales, diálogos y la representación de situaciones de la vida real. Se fomentan las discusiones en grupo y es más apropiado para estudiantes de nivel intermedio y avanzado.
El enfoque léxico
Se trata de un enfoque relativamente moderno que cobró importancia a principios de la década de 2000, en gran parte gracias al trabajo de Michael Lewis. En lugar de traducir directamente palabras sueltas, se centra en las «frases léxicas» o «trozos» de uso común que suelen encontrarse juntos y en diferentes situaciones. Los estudiantes adquieren una mayor comprensión de la lengua a través de extensas lecturas y juegos de rol.
Estos son sólo doce de los métodos de enseñanza más comunes, y un buen profesor seleccionará no uno, sino muchos de estos sistemas, entrelazando actividades de las diferentes metodologías en un plan de estudios completo y atractivo.